viernes, 21 de diciembre de 2012


TIC..TAC..TIC..TAC.. ¡FELICES MOMENTOS!



Días especiales, encuentros familiares, más tiempo para descansar y donde hay niños sueños y emoción…
Quiero haceros llegar desde aquí mi deseo de que disfrutéis de cada momento y que hagáis un poquito más lo que os dé la gana…


Quiero compartir con vosotros esta canción llena de ternura, el autor de la canción es Mikel Laboa pero a mi ésta interpretación de Maite Itoiz y John Kelly me traspasa.
Su titulo es Txoria txori, y habla del amor verdadero, ese que no necesita poseer, ese que respeta al otro tal cual es…

Si le hubiera cortado las alas
habría sido mío,
no habria escapado.

Pero así,
habría dejado de ser pájaro.

Y yo...
yo lo que amaba era un pájaro.




Felices días.

viernes, 14 de diciembre de 2012

TARTA DE QUESO CON COBERTURA DE CARAMELO


Hay recetas de triunfo seguro y esta que traigo hoy es una de ellas. Es del maestro pepinho del blog i-recetas la enciclopedia dulce.

Las tartas de queso horneadas o New York cheescake son muy cómodas. En ocasiones en que tenemos invitados, podemos tenerla preparada con antelación y espera en la nevera sin perder virtudes como puede pasar con otras tartas.


Esta cheescake junto con la de chocolate blanco y frambuesas son las más ricas que he probado jamás.

Yo hago una versión para un molde de 28 cm.


Para mí los secretos de su elaboración son:
  • -      Mezclar los ingredientes con mucho cuidado, sin batidora eléctrica para no meter aire que haría que en el horno suba y luego quede con una forma un poco fea.
  • -      Hornear al baño maría en un molde con base ajustable, con papel de hornear en su interior y papel de aluminio en el exterior para evitar que el agua del baño se cuele en el molde (no suelen ser herméticos al cien por cien).
  • -      Dejar enfriar con el horno apagado durante largas horas o toda una noche con la puerta un poco abierta, de esta manera evitaremos que se agriete su superficie.
  •      A la mañana siguiente a primera hora elaboraremos la cobertura  y deberán pasar al menos tres horas hasta su consumo.

INGREDIENTES
BASE:
100 gr. de mantequilla fundida
350 gr. de galletas Digestive trituradas.
50 gr. de cacao en polvo.
RELLENO:
160 gr. de azúcar glass
2 cucharadas de maicena (rasas)
4 huevos.
60 ml. de zumo de limón
extracto de vainilla ½ vaina
500 gr. de queso crema (tipo Philadelphia)
400 ml. de nata fresca

Primero trituraremos las galletas (si no tenemos trituradora, las colocamos entre dos hojas de papel de hornear dobladas y les vamos pasando en rodillo por encima para que se vayan rompiendo hasta conseguir una especie de “serrín” menudito.
Forramos un molde desmoldable de unos 28 cm de diámetro con papel de hornear. Engrasamos  ligeramente el papel. Fundimos la mantequilla  con cuidado en el microondas y mezclamos con la galleta triturada y el cacao hasta formar una pasta. Cubrimos la base del molde. Reservamos en el frigorífico para que se enfríe mientras preparamos el relleno.
Se precalienta el horno a 170º C preparando el baño maría, esto es, poniendo la bandeja del horno con agua. Mezclamos  con una espátula  sin batir el queso crema con el azúcar. Añadimos la maicena, mezclamos de nuevo y añadimos los huevos de uno en uno para que se mezcle mejor.
Añadimos el zumo de limón, la nata  y las semillas de la media vaina de vainilla  removiendo con cuidado. Rellenamos el molde e introducimos en el horno al baño María durante unos 50 minutos. No debemos abrir la puerta del horno en ningún momento mientras el horno esté caliente. Pasado el tiempo apagamos el horno y una hora después lo dejamos entreabierto con ayuda de una cuchara de madera, así durante toda la noche.


Al día siguiente preparamos la salsa de cobertura con estos INGREDIENTES:
160 gr. de azúcar.
200 ml. de nata
80 gr. de mantequilla

Calentamos al fuego un cazo con el azúcar y medio vaso de agua para hacer un caramelo, teniendo cuidado de no introducir la cuchara para revolver pues se nos cristalizaría.  Hay que estar muy pendiente para que el caramelo este en su punto exacto y estar preparados con la nata abierta, si no se nos podría quemar.

Cuando el caramelo tenga un ligero tono avellana lo apartaremos del fuego y añadiremos con cuidado la nata. Volvemos a llevar al fuego a temperatura media, removiendo con una cuchara de madera hasta que se funda el caramelo y forme una salsa espesa. Hay que tener en cuenta que al enfriar espesará más. Finalmente fuera del fuego añadir la mantequilla y dejar que enfríe removiendo de vez en cuando. 

Templada o fría la verteremos sobre la tarta que tendremos sin desmoldar y lo lleváremos de nuevo al frigorífico al menos tres horas más.

Es sin duda un postre ideal para días de celebración, con este tamaño, da para diez raciones.

Los bordes en este tamaño me han quedado irregular por el papel de hornear porque no solo lo he puesto en el fondo si no que también en las paredes. El motivo es que la medida del papel de aluminio es insuficiente para evitar que llegue el agua del baño maría dentro del molde, y el papel de hornear que es mas ancho protegerá la tarta.     En el caso del molde de 22 o 20 cm. no tendremos este problema, y los ingredientes serán la mitad exacta.

Si alguien se anima a hacerla, repetirá seguro.




Y como no puede ser de otra manera me voy de paseo al campo.


domingo, 9 de diciembre de 2012


UN PASEO SOBRE LAS NUBES



Desde hace tiempo tenía ganas de fotografiar un amanecer con todo el valle cubierto de niebla, el mar de nubes que tan bien  reflejó en su cuadro el pintor alemán Friedrich.



Es un fenómeno atmosférico de gran belleza sobre todo si lo podemos contemplar desde arriba, donde las temperaturas son superiores.
Desde la ventana de mi cocina veo todos los días la atalaya natural desde la que están sacadas estas fotografías.


Después de días  de lluvia y granizo llega solitario algún día de sol que tiene que esperar tras este mar de nubes para podernos iluminar. Hay ocasiones en que la niebla no despeja hasta el mediodía y se intuye el sol sobre ella pero le cuesta dejarse ver.


Quiero también dejaros esta, para mí, preciosa poesía de Kostantínos Kavafís  que releo muy a menudo y que desde hace tiempo se convirtió en mi particular “lema”.

Habla de lo importante que es valorar el “camino”  y vivir el día a día sin importarnos tanto el destino… teniendo presente a la muerte con valentía, disfrutaremos de cada minuto como si fuera el último.

El dolor no viene desde fuera, nos lo generamos nosotros con nuestras emociones y pensamientos, los "lestrigones y los ciclopes "de los que habla el poeta… es difícil dominar "la cólera de Posidón", pero hacerlo y trabajar en ello equivale a caminar sobre las nubes…

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                            


ÍTACA.



Cuando emprendas tu viaje hacia Ítaca

debes rogar que el viaje sea largo,

lleno de peripecias, lleno de experiencias.

No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,

ni la cólera del airado Posidón.

Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta

si tu pensamiento es elevado, si una exquisita

emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.

Los lestrigones y los cíclopes

y el feroz Posidón no podrán encontrarte

si tú no los llevas ya dentro, en tu alma,

si tu alma no los conjura ante ti.

Debes rogar que el viaje sea largo,

que sean muchos los días de verano;

que te vean arribar con gozo, alegremente,

a puertos que tú antes ignorabas.

Que puedas detenerte en los mercados de Fenicia,

y comprar unas bellas mercancías:

madreperlas, coral, ébano, y ámbar,

y perfumes placenteros de mil clases.

Acude a muchas ciudades del Egipto

para aprender, y aprender de quienes saben.

Conserva siempre en tu alma la idea de Ítaca:

llegar allí, he aquí tu destino.

Mas no hagas con prisas tu camino;

mejor será que dure muchos años,

y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,

rico de cuanto habrás ganado en el camino.

No has de esperar que Ítaca te enriquezca:

Ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.

Sin ellas, jamás habrías partido;

mas no tiene otra cosa que ofrecerte.

Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.

Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,

sin duda sabrás ya qué significan las Ítacas.




Feliz camino

jueves, 6 de diciembre de 2012


DULCE DE MEMBRILLO


Vengo con esta receta tardísimo, pero prometo que el de nueces lo prepare ayer y que en árbol de membrillos todavía queda alguno.



Tenía la receta desde que en octubre preparé el dulce en tarros de cristal para conservar como hago todos los años.

Este año había muchísimos y yo creo que por las sequías del verano su maduración ha sido muy tardía. Aquí en circunstancias normales el mes por excelencia del membrillo es septiembre.


Muchos blogs publicaron la receta del dulce, en la que poco variamos de unos a otros. Pero vi algunas recetas que incorporaban las nueces y la idea me pareció buenísima porque además de coincidir la época de recolección son dos cosas que combinan muy bien.


El procedimiento en la elaboración puede variar mucho y los resultados también.
Creo que lo más difícil es que te quede dos veces igual de color  y que cuaje en el mismo tiempo.
A mí personalmente me gusta mezclar manzana que suaviza el resultado, pero también es más fácil de cuajar si solo tiene membrillo.
El porcentaje de manzana puede variar, en muchas ocasiones lo he preparado al 50%.
La proporción de azúcar también puede variar pero con 700g. de azúcar por cada Kg. de pulpa de manzana es suficiente.

INGREDIENTES:
Manzanas
Membrillos
Azúcar
Zumo de limón

Primero de todo, limpiaremos muy bien la fruta sobre todo los membrillos a los que con un pequeño cepillo hay que quitarle la pelusilla que tiene la piel. Luego hay que partirlos en cuatro trozos y no quitar ni las semillas que tienen junto con la piel la mayor parte de la pectina que propicia que el dulce cuando enfría cuaje.
Poner los cuartos del membrillo en una olla a presión y añadir el zumo de limón y tres cucharadas de agua o más si la cantidad de fruta es muy grande.
Cerraremos la olla y la pondremos al fuego hasta que empiece a silbar la válvula y a salir vapor de manera continua en el dos. Apagarla y dejarla sobre el fuego hasta que se enfríe un poco y baje la presión y vuelva a bajar la valvula.
Abrir con mucho cuidado y comprobar que la carne del membrillo esté blanda, si no es así volver a poner otra vez un poco tiempo más y que vuelva a subir la presión de la olla.
Si utilizamos manzana haremos igual que con el membrillo pero por separado por que es más blanda y necesita menos tiempo.
Nada mas sacarla y en caliente la pasamos por un pasapurés o como hago yo por una tomatera manual que ahorra mucho trabajo.
Pesaremos la pulpa resultante y pondremos en una cazuela la pulpa de las dos frutas y 700g. de azúcar por Kg. de fruta.
Pondremos a cocer la mezcla durante el tiempo necesario para que alcance la consistencia para que cuaje (aproximadamente 30 minutos). Durante la cocción no podemos dejar de removerlo con una espátula o cuchara de madera porque si no es así se pegará al fondo y se quemará.
No es una labor cómoda y es mejor hacer pequeñas tandas de dulce.
Cuando el dulce ha espesado, pero tenemos dudas de si está en su punto, pondremos una cucharada en un plato y lo pondremos en la nevera un rato para comprobar 15 minutos después si está cuajado. Si no es así tenemos que seguir cociendo el dulce hasta conseguir el punto exacto.


Otra cosa a tener en cuenta es que durante la cocción la mezcla
salpica mucho y es recomendable tener puesta prendas de manga larga o guantes de goma para evitar quemaduras. No soy gran defensora de los robots de cocina pero en este caso la “thermomix”  es una buena aliada.


También quiero aportar que la mejor manera de conservar durante todo el año y tenerlo siempre listo para cuando lo necesitemos. Utilizaremos tarros de conserva de los mismos que se utilizan para la conserva de bonito, que tienen la peculiaridad de que el cuello tiene el mismo diámetro que el resto del tarro.

Los limpiaremos bien con agua muy caliente y cuando se hayan secado, comenzaremos llenarlos con en dulce de membrillo que deberá estar hirviendo, deberemos llenar justo hasta el borde pero sin pasarnos ni quedarnos cortos porque no tiene que quedar sitio y a continuación colocaremos una tapa nueva y limpia. Cerraremos con fuerza y dejaremos enfriar el tarro colocado del revés para que se esterilice la tapa.

Y ya estará lista para guardar. El día que lo necesitamos, abrimos el tarro y lo desmoldamos con ayuda de un cuchillo como si se tratara de un flan.


Solo añadir que la de nueces, es el complemento perfecto cuando la consumamos con queso curado. Aunque a mí el dulce de membrillo me gusta más para el queso fresco.

               DISFRUTAD DE ESTOS DIAS
                    DE DESCANSO

miércoles, 21 de noviembre de 2012


Tarta crumble de manzanas y moras


Hoy vengo con una receta de celebración, mi primer cumpleblog  fue ayer.
Me apetecía hacer algo que de verdad me supiera a celebración, recién cocinado y calentito.


Mientras escribo tengo el sabor y el olor en mis sentidos…


Quería una receta que fuera fiel reflejo de lo que más me inspira. Que aunara el otoño, las manzanas y uno de mis libros preferidos que está en mi compañía desde hace más de veinticinco años y que con solo echar un vistazo me entran ganas de cocinar y de pintar.


Está lleno de recetas de jarabes, confituras, chutneys, galletas y tartas todo ello con una raíz campestre y basada en las frutas y en el otoño. 


Las autoras a través de los bodegones fotográficos despiertan nuestras ganas de ponernos a hornear algo. Siempre ha sido un libro mágico… fuera el momento que fuera… su sola contemplación me hacía sentir bien.

Quería también que fuera una receta rústica y sencilla, reflejo de las cosas que más me gustan.

“Los brillantes rojos y dorados, los cálidos canelas y los marrones quemados de la madera y los campos, los huertos y los setos evocan el romanticismo y los placeres prácticos de la cosecha.”
Con estas palabras comienza EL CAMPO EN CASA.


En la tarta que he hecho no he seguido la receta que indicaba, solo la he utilizado como inspiración. La receta es un “remix total” de otras que he hecho otras veces y algún pequeño cambio nuevo.

INGREDIENTES:
150 g. mantequilla
150 g. azúcar
3 huevos
200 g. harina
2 cucharillas de polvos de hornear
125 ml. nata liquida

Relleno:
100 g. moras silvestres (congeladas, fruto de mis paseos de verano)
3 manzanas cortadas en rodajas no demasiado finas
25 g, mantequilla
25 g. azúcar
un poco de canela en polvo

Crumble:
60 g. mantequilla
50 g. azúcar integral de caña
75 g. harina



Primero de todo ponemos en una sartén los 25 g. mantequilla y los 25 g. de azúcar y las manzanas cortadas en rodajitas con la pizca de canela para que se vaya cociendo poco a poco, en mi caso al ser manzanas reinetas con 5 minutos fue suficiente. Dejar que se enfríe.
A continuación mezclaremos formando como migas los ingredientes del crumble, frotando hasta formar un granulado.



Con una batidora eléctrica mezclaremos la mantequilla  a temperatura ambiente (ligeramente blanda) y el azúcar de la base y cuando veamos que el resultado está cremoso vamos añadiendo uno a uno los tres huevos, finalmente la harina tamizada y el polvo de hornear y la nata liquida. Cuando todo esté integrado lo pasamos a un molde previamente forrado de papel de hornear y mantequilla, y lo distribuimos de manera regular. Colocamos las rodajas de manzana ligeramente cocinadas que ya estarán frías y las moras y sobre todo ello el crumble que ya tenemos preparado.


Y ya está lista para ir al horno, 180 grados durante 55 o 60 minutos dependiendo de cómo sea nuestro horno.
Si vemos que la superficie se tuesta demasiado la protegeremos con papel de aluminio.


Antes de sacarla del horno comprobaremos si está hecha con una brocheta, si sale limpia… ya está en su punto.     Dejaremos templar ligeramente y desmoldaremos (yo utilicé un molde desmontable pero no es necesario).
Templada esta riquísima y acompañada de helado forma una combinación perfecta.
Cuando esté fría, se puede templar en el microondas en la función de descongelar y queda como recién sacada del horno… menos el crumble de arriba que se reblandece ligeramente.

Y como banda sonora de esta receta, nada mejor que el incombustible Tom Waits y su mágica canción “The long way home” .


     feliz día

lunes, 12 de noviembre de 2012


Luz de otoño y recolección de manzanas

Días más cortos, temperaturas más bajas, lluvia más frecuente…




Pero cuando luce el sol podemos ver toda la explosión de colores que nos regala el otoño. No tengo adjetivos suficientes para describir ese esplendor, donde el verde de la hierba vuelve a ser tan intensos como en primavera…, con esas hojas de los arboles que antes de caer pasan por toda la gama de dorados y cobrizos… donde muchos arbustos maduran sus bayas que serán el alimento de algunos pájaros en invierno.




También son días de recoger las últimas frutas de los arboles ¡que placer!.
Manzanas, kiwis, uvas y los últimos membrillos. Pero las manzanas tienen una magia muy especial.


Después de un caluroso verano, y mucha sequía las lluvias de septiembre creo que ayudaron un poco a que no se quedaran las manzanas demasiado pequeñas… cosa que tampoco es que me preocupe demasiado.


Las manzanas, como los seres humanos, no crecen en serie todas del mismo tamaño… por mucho que parezca después de echar  un vistazo en las fruterías.

Desde aquí dejo constancia que no me gusta tener la sensación de que la fruta es un producto más de la industria alimentaria, sujeto a calibres, con conservantes y a nuestra disposición en cualquier mes del año aunque haya que cultivarlas en la luna…




Sé que no está al alcance de todos tener un huerto de frutales, pero también hay mercados de productores en algunas ciudades y algunas ferias que nos brindan la oportunidad de redescubrir el sabor de la “fruta natural”.






He improvisado algunas recetas de tartas donde la manzana no era acompañamiento ni adorno, era la base, el ingrediente principal.


Calentita, recién sacada del horno, llena del aroma inconfundible de la manzana “reineta” asada, con un pequeño toque de canela… ¡es una delicia!


Hoy para darles el cariño que merecen las traigo aquí en exclusiva, en días posteriores vendrán las recetas. Va a ser un placer que espero compartáis con migo.

                            FELIZ OTOÑO