miércoles, 27 de junio de 2012


Txipirones en su tinta

Regreso de mi ausencia con una receta que en este momento y de aquí en adelante está en plena temporada… “txipirones” (para muchos son calamares en su tinta y la manera de presentarlos es troceados, y con algun que otro cambio en los ingredientes).


La calidad del plato varía dependiendo del origen de la materia prima, si son congelados y proceden de ultramar su textura es diferente a si son de potera y de aguas del cantábrico.


Estos últimos, ahora que la luz del verano nos ilumina y acompañados de un poco de arroz blanco y bien de pan para la salsa y una botellita de txakolí, son un placer para el paladar.



INGREDIENTES:
v 1 kg. de txipirones
v 3 cebollas blancas
v 2 pimientos verdes
v 2 rodajas de pan
v 4 cucharadas de salsa de tomate
v Unas ramas de perejil
v 1 cucharada de maicena para rectificar el espesor de la salsa
v Aceite

Para limpiar los calamares, primero de todo apartaremos de su interior la bolsita que contiene la tinta con la que luego haremos la salsa.

A continuación apartaremos los tentáculos y daremos la vuelta para limpiar su interior, donde a posteriori volveremos a introducir los tentáculos.

Se deja en un escurridor para que pierdan la mayor parte de humedad y no salpiquen al cocinarlos.

Sazonaremos con sal.

Pondremos una sartén con aceite y cuando esté caliente iremos depositando los clamares pasados por harina con los tentáculos en su interior. Doraremos por los dos lados, y los sacaremos a una cazuela donde luego cocerán con la salsa.

En la misma sartén pondremos a pochar la cebolla cortada en juliana, con el pimiento verde a fuego moderado. Cuando la cebolla y el pimiento estén blandos se añade la salsa de tomate, las ramitas de perejil enteras y las rodajas de pan que primero freiremos. Finalmente añadiremos las tintas que teníamos reservadas y agua  y dejaremos cocer durante veinte minutos o más. Si los calamares eran congelados añadiremos tinta de calamar de la que se comercializa para tal uso.

Pasado el tiempo de cocción trituraremos la salsa y la pasaremos por un  colador o chino para conseguir que quede fina (añadiremos más agua si lo vemos necesario).
Sazonamos un poco la salsa y la ponemos en la cazuela en la que hemos dejado los calamares después de freírlos. Ponemos a cocer a fuego moderado.

El tiempo de cocción es la mayor dificultad de este plato, puesto que depende de la calidad del calamar. Pero si son frescos con media hora de cocción será suficiente.

La experiencia nos dará  las claves, de cuanto será el tiempo necesario de cocción. Pinchando con un tenedor tendremos una idea del grado de dureza y si es necesario más tiempo de cocción o ya están listos.

Finalmente comprobar que la salsa no esté ni demasiado liquida, ni tampoco muy espesa. Corregiremos añadiendo agua o en caso de que este muy liquida maizena disuelta en un vasito de agua.

Tras un hervor dejaremos que reposen y ya estarán listos.


La rosca de pan y los demás panes está hecha con la misma receta que mi primera entrada “panecillos franceses”.


Feliz Día

4 comentarios:

  1. Qué razón tienes, los del cantábrico y de potera, no tienen nada que ver con los del resto del mundo mundial, jejje somos unos privilegiados. Buenísimos, me iré a tu primera receta para hacer esos espectaculares panes,bss

    ResponderEliminar
  2. Menudos Txipis. Como dice Marga los de potera y mas si son del cantabrico, no tienen nada que ver con los comprados. Como digo yo, será que somos muy especiales, o de costa de siempre:).

    Creo qeu me voy a poner las botas con tu blog, que por lo que veo tiene muchas cosas en común con el mío. Nos gustan cositas similares. Esos panes madre mía con el hambre que tengo, ya me llebava yo un buen pedazo para mojar en esa salsa.

    Encantada de descubrirte, así que me quedo de seguidora y a curiosear se ha dicho.

    Bss

    Virginia "sweet and sour"

    ResponderEliminar
  3. Oye Flori que quiero hacerme seguidora por mail y no puedo... Brrr

    ResponderEliminar
  4. Qué buenos, los chipirones en su tinta, con su arrocín blanco y eso, de potera, del Catábrico. Cuando mi padre se jubiló y comenzó a cocinar era su plato estrella, no te imaginas cuantos chipirones comimos hace dos años!! Y esos panes que nos propones son preciosos!! Inagurada la temporada de los bocatas y merendolas al aire libre probaré a hacer esa rosca tan bonita.Besos!

    ResponderEliminar